Nuestra compañera Beatriz Hernández nos habla de la Periodontitis
Boca sana
En una boca sana, las encías están firmemente unidas a los dientes, creando un sello protector. Sin embargo, cuando no se cuida adecuadamente la higiene oral, se acumulan bacterias en la superficie de los dientes, formando una película invisible llamada placa. Esta placa puede transformarse en sarro si no se elimina mediante el cepillado y el uso de hilo dental regular.
Ahora bien, si la placa y el sarro no se controlan, las bacterias que la conforman pueden empezar a causar estragos en el tejido de las encías. En este punto, estamos en el territorio de la gingivitis, la etapa inicial de la enfermedad de las encías. La gingivitis se manifiesta con síntomas como encías rojas, hinchadas y sangrantes, especialmente durante el cepillado.
Si la gingivitis no se aborda, puede evolucionar hacia la periodontitis. Aquí es donde la cosa se pone más seria. La periodontitis implica una inflamación más profunda que afecta no solo a las encías, sino también al hueso que sostiene los dientes. Imagina que los «cimientos» de tus dientes están en riesgo.
Periodontitis
En la periodontitis, las encías pueden alejarse de los dientes, formando bolsas o espacios que se llenan de más bacterias y desechos. Estas bacterias producen toxinas que dañan el hueso y las fibras que mantienen los dientes en su lugar. Como resultado, los dientes pueden volverse flojos y, en casos graves, incluso caerse.
La periodontitis no solo afecta a los dientes; también tiene consecuencias para la salud general. Se ha demostrado que la inflamación crónica asociada con esta enfermedad puede estar vinculada a otras condiciones, como enfermedades cardíacas y diabetes.
La buena noticia es que la periodontitis es prevenible y tratable. La clave está en mantener una buena higiene oral: cepillarse los dientes al menos dos veces al día, usar hilo dental para eliminar la placa entre los dientes y acudir regularmente al dentista para chequeos y limpiezas.
Resumen sobre la Periodontitis
En resumen, la periodontitis es como un «terremoto» en el mundo de tus dientes. Comienza con pequeños temblores, representados por la gingivitis, pero puede volverse devastadora si no se controla. Cuidar tus dientes es como construir edificios sólidos en un suelo firme. La prevención es la mejor estrategia para mantener tu sonrisa en pie y tu salud bucal en buena forma.
